Los casos de violencia sexual contra menores de edad en Haití se multiplicaron en un año por diez, según una estimación del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), que alertó de los "horrores inimaginables" de los que son víctimas los niños en un país marcado por la violencia de los grupos armados.



Un portavoz de UNICEF, James Elder, advirtió de que 1.2 millones de niños "viven bajo la amenaza constante de la violencia armada" en Haití, donde el reclutamiento de menores por parte de grupos armados aumentó también un 70 %. "Ahora mismo, la mitad de todos los miembros de grupos armados son niños, algunos de tan sólo ocho años", señaló durante una comparecencia en Ginebra.

"A muchos se los llevan por la fuerza. Otros son manipulados o se ven arrastrados por la pobreza extrema", de tal manera que se crea un "ciclo letal", en el que "los niños terminan siendo reclutados por los grupos que alimentan su propio sufrimiento", agregó.



El portavoz de UNICEF subrayó además en los efectos colaterales de esta violencia, con medio millón de niños desplazados de sus hogares y más de 300,000 sin posibilidad de ir a clase. En términos humanitarios, "unos tres millones requerirán asistencia humanitaria urgente este año".

Elder apeló a la solidaridad de la comunidad internacional y advirtió de que los fondos reclamados por UNICEF en 2024, $221.4 millones, apenas están cubiertos en una cuarta parte. Algo que contrasta con "las necesidades urgentes" sobre el terreno.