Cada 10 de septiembre se conmemora “Dia Mundial de la Prevención del Suicidio” este año 2024 el lema en la red mundial de suicidólogos es “Cambiemos la narrativa sobre el suicidio” El año 2020 nos dejó la llegada y los efectos de la pandemia por el COVID-19, durante el año 2019 se estimaron los suicidios en al menos 800,000 personas en el mundo; cada 40 segundos en promedio alguien toma la decisión de quitarse la vida. Algunas asociaciones y organizaciones en el mundo que trabajan en la prevención del suicidio estiman que en el año 2021 entre un millón, y millón trescientas mil personas se suicidaron como consecuencia de pérdidas significativas a todo nivel.



La atención psicológica y de la salud metal ha sido descuidada por la mayoria de países en el mundo, y no es de asombrarse que en países de ingresos bajos y medios los presupuestos para la salud mental y fisica sean insignifcantes; el médico estadounidense Víctor Tseng enumeró las cuatro olas que hay que enfrentar antes, durante y posterior a la pandemia por COVID-19, según el especialista la denominada “cuarta ola” es de mayor crecimiento y duración en el tiempo, y es la que se refiere a la afectación en la salud mental y económica por diferentes pérdidas de vida y de ingresos. Otros autores, incluso la denominan como “quinta ola” que son efectos de forma tardía acumulativos de situaciones detonantes posterior a la pandemia.

En El Salvador en la década anterior, y la presente los casos de suicidios no son silenciosos, ni son ocasionales, el real y existe un grave problema de salud mental en un alto porcentaje de nuestra sociedad, por ello es indispensable que pensemos con amor por el más cercano, que dejemos el egoísmo y el individualismo, para estar atentas y atentos al que necesite ayuda. En nuestro país somos los hombres los que mayoritariamente nos quitamos la vida, con menos intentos, pero mayor efectividad. La mujer intentará quitarse la vida entre 4 a 6 ocasiones hasta lograrlo en promedio.



Uno de los principales mitos en el mundo que estamos quebrando desde la Red Mundial de Suicidólogos es que la prevención del suicidio es solo una responsabilidad de los profesionales de la salud mental, psicólogos y psiquiatras; en la prevención podemos y debemos apoyar todas y todos, ya que desde nuestros roles en la sociedad podemos contribuir en gran manera con la observación del más próximo, por supuesto primero en casa, la familia, la comunidad, el trabajo, en las iglesias, para iniciar un proceso de escucha activa, de atención sincera y genuina, que nos permitan acompañar a esa persona, y poder hacerle sentir que no esta sola o solo. Y referir a los profesionales de la salud mental. Todos tenemos talento, conocimiento y habilidades que podemos poner a disposición de la prevención del suicidio, siendo equipo, siendo cuerpo.
Durante estos tres meses del año 2024 y el 2025 le animo a cambiar la narrativa sobre conversar sobre el suicidio y como prevenirlo, sumarse al esfuerzo de apoyar a la persona que tenga más próxima iniciando por su familia, amigos, vecinos y compañeros de trabajo. Rompamos la indiferencia.

En El Salvador los hombres, mujeres, adolescentes y jóvenes debemos de morir llenos de vida y con nuestros sueños cumplidos, debemos morir en la denominada “cuarta edad” El suicidio en mi opinión es la muerte más prevenible de todas, de todas. Si tienes problemas y te sientes solo o sola, si has pensando en quitarte la vida puedes escribir a : info@ricardososa.net estamos para apoyarte y ayudarte a que abraces la vida, disfrutemos la vida plena.