El expresidente de la Asamblea Legislativa, Sigfrido Reyes, pregonó nuevamente su inocencia y aseguró que su equipo de abogados la probará después de que el Juzgado Segundo de Instrucción de Salvador lo enviara a juicio por los delitos de lavado de dinero y peculado.
“Lamentamos que en esta ocasión no se haya producido el sobreseimiento definitivo, cómo corresponde conforme a derecho, ante la inexistencia de delitos. Nuestro equipo legal está preparado para demostrar, ante un Tribunal de Sentencia, con pruebas sólidas e irrefutables, que no existe ningún delito alguno que perseguir”, escribió en una publicación en su perfil de Facebook.
El exdiputado por el FMLN alegó que la resolución del juez es “totalmente injusta”, al tiempo que señaló que la acusación de la Fiscalía General de la República (FGR) es “maliciosa y sin base a pruebas”.
La FGR acusó al exdiputado de haber adquirido de forma ilícita bienes raíces del Instituto de Previsión Social de la Fuerza Armada (IPSFA), por un perjuicio patrimonial valuado en $395,317.25. Además fue señalado de apropiarse indebidamente de $126,609.13 en concepto de viáticos.
En la audiencia preliminar realizada este viernes, el abogado defensor Pedro Cruz indicó que se retiró la acusación de apropiación fraudulenta de bienes raíces del IPSFA.
En la publicación escrita en tercera persona, se calificó la acusación de estafa al IPSFA como “ridícula y temeraria”, al tiempo que alegó que “en ningún momento se cometió ni se pudo haber cometido” peculado, por lo cual consideran el proceso como "persecución judicial por motivaciones políticas".
“Sigfrido Reyes nunca manejó fondos públicos, ni percibió indebida o ilegalmente un tan solo centavo en calidad de viáticos por cumplir misiones oficiales representando al Órgano Legislativo en el exterior”, señaló.
Durante el proceso inicial se acusó al expresidente de la Asamblea Legislativa y 13 personas más, pero, en la resolución de este viernes, se dio sobreseimiento a cuatro personas, dos exempleados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) y dos empleados de IPSFA.
A etapa de juicio fueron enviados el hermano del exdiputado, Earle Reyes Morales; su esposa, Susi Melba Rodríguez; y su exasesor, Byron Enrique Larrazábal, por el delito de lavado de dinero.
Además, del gerente general del IPSFA, René Díaz Argueta por el delito de incumplimiento de deberes, así como a una exempleada de la Corte de Cuentas, acusada por falsedad documental. No obstante, no dio a conocer a los cuatro acusados restantes.
