La instalación de cables de fibra óptica y de Internet de rápida velocidad, Starlink, ya está en el 80 % de las escuelas, aseguró el presidente salvadoreño Nayib Bukele, el pasado jueves durante la inauguración de una escuela en San Luis Talpa y en el lanzamiento del programa "Dos escuelas por día".



"Estamos poniendo fibra óptica y Starlink en todas las escuelas del país para que tengan internet de alta velocidad en todas las escuelas del país, no hemos terminado, ya tenemos el 80 % de los centros escolares cubiertos, pero esperamos pronto llegar al 100 % y poder decir en un próximo discurso: hemos llegado al 100 % de las escuelas con internet de alta velocidad, gratuito para nuestros niños", dijo el mandatario en su discurso sin dar mayores detalles.

Después de la pandemia, la Secretaría de Innovación señaló que había empezado un proyecto de instalación de fibra óptica en las escuelas para que éstas tuvieran internet de alta velocidad. En su momento, el entonces secretario de Innovación, Vladimir Hándal, estimó una inversión de $57 millones para garantizar la conectividad de las escuelas en el año 2021.



Según el diccionario de conceptos, la fibra óptica es un medio físico de transmisión de información, usual en redes de datos y telecomunicaciones, que consiste en un filamento delgado de vidrio o de plástico, a través del cual viajan pulsos de luz láser o led, en la cual se contienen los datos a transmitir.

A través de la transmisión de estos impulsos de luz se puede enviar y recibir información a importantes velocidades a través de un tendido de cable, a salvo de interferencias electromagnéticas y con velocidades similares a las de la radio. Esto hace de la fibra óptica el medio de transmisión por cable más avanzado que existe.

En mayo reciente, el actual secretario de Innovación, Daniel Méndez, anunció que hay 700 establecimientos de salud, incluidos hospitales y unidades de salud, y 4,000 centros escolares, incluidas escuelas e institutos, conectados a fibra óptica.

El año pasado, la Asamblea Legislativa aprobó $6 millones para el pago del servicio de internet satelital Starlink, de Elon Musk, por un año, y a la creación de una aplicación de verificación.