Más de un centenar de fieles, religiosos y académicos se congregaron este jueves en la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA) para despedir al sacerdote hispano-salvadoreño José María Tojeira, cuyos restos fueron sepultados en la capilla Jesucristo Liberador de la institución jesuita, donde descansan también sus compañeros asesinados en 1989.

La ceremonia de despedida se realizó en el polideportivo de la UCA y reunió a sacerdotes, maestros, estudiantes, miembros del Instituto de Derechos Humanos (Idhuca) y fieles católicos. Entre los asistentes destacaron la embajadora de España en El Salvador, Sonia Álvarez Cibanal, el rector de la UCA, padre Mario Cornejo, y el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, quien presidió la misa de cuerpo presente.

El acto estuvo marcado por cantos, oraciones y recuerdos de la vida del padre Tojeira, quien fue rector de la UCA entre 1997 y 2011. Los presentes exaltaron su compromiso con las causas sociales, la defensa de los derechos humanos y su constante reclamo de verdad y justicia por la masacre de seis jesuitas y dos colaboradoras en 1989, perpetrada por soldados del Ejército salvadoreño.

El padre Rodolfo Cardenal recordó a Tojeira como un hombre cercano, apasionado por el fútbol y crítico con las injusticias. En su homilía, Cardenal destacó que el padre Chema “entró en el ámbito nacional con la denuncia de la masacre de la UCA en noviembre de 1989” y que nunca dejó de exigir justicia para las víctimas de la violencia en El Salvador.

El rector de la Universidad Centroamericana (UCA), Mario Cornejo, habla durante la misa exequial en honor al padre José María Tojeira este jueves, en Antiguo Cuscatlán . EFE. Rodrigo Sura

Cardenal subrayó además que Tojeira defendió causas como el derecho universal al agua, el rechazo a la minería metálica, la justicia transicional y la reconciliación nacional, enfrentando incluso al poder militar y político de El Salvador y Estados Unidos.

“Su voz resonó en el desierto de la indiferencia, el materialismo y el individualismo”, señaló el padre Cardenal.

Tras la misa, los restos de Tojeira fueron trasladados a la capilla Jesucristo Liberador de la UCA, donde reposará junto a los jesuitas asesinados. Su papel fue determinante en impulsar la causa penal contra los altos mandos militares señalados en ese crimen.

El padre Chema falleció el pasado 5 de septiembre en Guatemala. Sus restos fueron trasladados a El Salvador el martes para las honras fúnebres. Nacido en Vigo, España, en 1947, estudió Teología y Filosofía en la Universidad de Comillas y llegó a Centroamérica en 1969.

Fue nombrado provincial de los jesuitas en 1988, en plena guerra civil salvadoreña, consolidándose como una de las voces más influyentes en la lucha por la justicia y los derechos humanos en la región.