Un total de 920 conductores fueron detenidos en El Salvador por conducción peligrosa entre el 1 de enero y el 14 de junio, según datos del Observatorio Nacional de Seguridad Vial.
Esta cifra representa una reducción del 18 % respecto al mismo periodo de 2023, cuando se registraron 1,129 capturas.
De acuerdo con el portal oficial, en promedio, seis personas son arrestadas a diario por conducir bajo los efectos del alcohol o estupefacientes.
La mayoría de estos arrestos se basan en pruebas de alcoholemia que confirman el nivel de intoxicación de los conductores.
Además, el Observatorio registra 16 personas fallecidas por conducir en estado de ebriedad o drogados en lo que va del año.
La Ley de Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial prohíbe terminantemente manejar bajo el influjo de sustancias prohibidas, incluyendo el alcohol.
La normativa contempla penas de 2 a 5 años de prisión y la suspensión de la licencia por un año para conductores particulares.
Para los conductores de transporte público o de carga pesada, la sanción puede alcanzar entre 5 y 10 años de prisión.
Durante el fin de semana, la Policía Nacional Civil (PNC) reportó públicamente seis nuevas detenciones por este delito.
El caso más grave fue el de Julio Ernesto Fuentes Abarca, quien chocó contra un árbol en el km 24 de la carretera a Quezaltepeque con 281 grados de alcohol.
Hasta el 14 de junio, se contabilizan 9,404 accidentes de tránsito a nivel nacional, de los cuales 904 fueron causados por conductores ebrios o drogados.
Esta causa se ubica como la séptima más frecuente en la generación de siniestros viales.
