Cada 31 de agosto, el pueblo de Nejapa, al noroeste de San Salvador, se convierte en el escenario de uno de los festivales más extremos y singulares de El Salvador: "La Recuerda", más conocido como las “Bolas de Fuego”.

Esta noche, la conmemoración llega a su aniversario número 103 y, más allá del impacto visual, la tradición guarda detalles curiosos que revelan la riqueza cultural de esta localidad.

Se trata de una batalla entre dos bandos de lugareños que recuerdan otra mítica disputa entre el patrono de la ciudad, San Jerónimo Doctor, y el mismísimo diablo, quienes se lanzaron bolas de fuego en una lucha entre el bien y el mal. El evento también recuerda la erupción del volcán de San Salvador en 1917, cuya lava, sorprendentemente, no dañó la localidad.

Los jóvenes del lugar se preparan con trajes y disfraces empapados, para lanzarse bolas de trapo amarradas con alambre y encendidas con gasolina, todo en frente de cientos de ciudadanos y turistas, que se arriesgan al espectáculo extremo. Las familias del lugar también preparan un festival de platillos que se ponen a disposición del público.

La cita es desde entrada la noche y hasta la medianoche, con un baile tradicional posterior al juego.

Las autoridades del municipio de San Salvador Oeste, han emitido recomendaciones de seguridad para quienes deseen asistir, entre ellas no utilizar ropa sintética ni prendas cortas, evitar llevar a infantes o adultos mayores, y respetar las instrucciones del personal de emergencia.