"Pedro Páramo", la mítica novela del escritor mexicano Juan Rulfo, llega a la pantalla de Netflix bajo la batuta del director de fotografía Rodrigo Prieto, quien dejó Hollywood para sumirse en la fantasmagórica Comala, donde ocurre la historia.

Un desierto polvoriento bajo un sol abrasador es el escenario en el que se asoma el pueblo: así empieza la primera película de Prieto como director.
ANUNCIO


Prieto recién había asumido la fotografía de "Barbie", de Greta Gerwig, y de "Killers of the flower moon" (Los asesinos de la luna), de Martin Scorsese, cuando adaptó a la pantalla esta obra que aún se lee en colegios de toda América Latina.

"Se la mostré a Martin Scorsese y a su hija Francesca", contó Prieto en el reciente Festival de Cine de Morelia.

Cinéfilo absoluto, Scorsese se mostró interesado, inclusive sin conocer la historia ni la mentalidad del México profundo que quiso retratar Rulfo en la novela publicada en 1955.

"Me dijo: 'Oye, este plano debería ser un poco más largo'. Lo alargué un poquito. Dos planos me sugirió que fueran más largos", relató Prieto, y añadió que también el hijo del escritor colombiano Gabriel García Márquez, Rodrigo García, fue su consejero.

La historia empieza con la llegada de Juan Preciado (interpretado por el actor mexicano Tenoch Huerta) a Comala para cumplir con la promesa que le hizo a su madre recién fallecida: buscar a su padre, Pedro Páramo.

Así retrata Prieto uno de los arranques más famosos de la literatura en español, en algún lugar entre el Quijote y "Cien años de soledad": "Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo".

El papel del cacique Páramo lo interpreta Manuel García Rulfo, que tiene un lejano parentesco con el autor de la novela.

"(Juan Rulfo) era primo hermano de mi abuelo, entonces tío abuelo mío", contó el actor en un programa de promoción de la película.

"Es increíble la oportunidad que me diera Rodrigo de hacer este personaje tan complejo", agradeció. "Más allá del tirano, del cacique, yo busqué humanizarlo", dijo.

Además de su fotografía, la película destaca también por las intérpretes femeninas que luchan contra el machismo arraigado en este México tradicional, como Ilse Salas, Yoshira Escárrega, Dolores Heredia, Giovanna Zacarías y Mayra Batalla.