En un esfuerzo por proteger a la población con herramientas de seguridad digital, BAC ha lanzado una campaña informativa para educar a los salvadoreños sobre las modalidades de fraude más comunes y cómo proteger su información financiera.

Entre las modalidades de fraude más frecuentes se encuentran:

Mensajes y correos engañosos: circulan SMS y mensajes de WhatsApp o correos electrónicos falsos que anuncian premios, descuentos o supuestas entregas de paquetería a nombre de marcas reconocidas. Su objetivo es que las personas hagan clic en enlaces fraudulentos para robar sus datos personales o bancarios.

Llamadas falsas: a través de llamadas telefónicas, los estafadores generan una sensación de urgencia para persuadir a las víctimas de que compartan códigos o información que les permita acceder a sus cuentas bancarias.

Sitios web y perfiles de redes sociales clonados: se crean páginas web y perfiles en redes sociales con nombres y logotipos casi idénticos a los de empresas legítimas. Estos perfiles ofrecen promociones falsas para atraer a usuarios y robar sus datos a través de formularios o realizar cobros fraudulentos.

Uso de Inteligencia Artificial (IA): en un avance preocupante, se ha detectado el uso de IA para manipular voces o rostros, haciendo que las estafas sean aún más difíciles de detectar.

Recomendaciones clave para una seguridad robusta

Para fortalecer la seguridad digital de los salvadoreños, BAC compartió una serie de recomendaciones prácticas y fáciles de seguir que sirven como señales de alerta y guías para la toma de decisiones informadas:

Información sensible: nunca se deben compartir datos como contraseñas, PIN o códigos de seguridad, ya que ninguna entidad bancaria legítima los solicitará por teléfono, correo o mensaje.

Autenticidad web: siempre se debe verificar que la dirección de un sitio web comience con "https" y que muestre el ícono de un candado cerrado en la barra del navegador, lo que indica una conexión segura.

Redes wifi públicas: se recomienda evitar realizar transacciones bancarias o ingresar información sensible cuando se está conectado a redes WiFi públicas, ya que son más vulnerables a ciberataques.

Contraseñas seguras: es crucial utilizar contraseñas de al menos 10 caracteres que combinen letras mayúsculas y minúsculas, números y símbolos para dificultar el acceso no autorizado.

Ofertas poco realistas: no se debe confiar en premios o descuentos que suenan demasiado buenos para ser verdad, ya que a menudo son anzuelos para estafas.