El senador de Estados Unidos por Nueva Jersey, Cory Booker, planea visitar El Salvador en los próximos días como parte de una ofensiva demócrata para exigir el retorno de Kilmar Ábrego García, un salvadoreño residente en Maryland que fue deportado erróneamente por la administración del presidente Donald Trump, a pesar de contar con protección judicial para permanecer en territorio estadounidense.
Booker, figura destacada del ala progresista del Partido Demócrata y exprecandidato presidencial, busca reunirse con autoridades salvadoreñas y constatar personalmente la situación de Ábrego García, quien actualmente permanece recluido en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot), en el occidente del país, según publicaron medios estadounidenses.
La visita de Booker sería la segunda de alto nivel, tras la del senador Chris Van Hollen, quien se reunió el jueves con el salvadoreño.
“El Tribunal Supremo fue claro: la administración Trump debe facilitar el regreso de Kilmar Ábrego García. No hay espacio para el debate. Cada miembro del Congreso debería defender la Constitución y exigir que esta orden judicial se cumpla”, escribió Booker esta semana en su cuenta de X.
Booker cobró celebridad a inicios de abril cuando pasó 25 horas hablando en el Senado contra las políticas de Trump, rompiendo el récord en ese órgano legislativo estadounidense.
El caso de Ábrego García se ha convertido en un símbolo del rechazo demócrata a las políticas migratorias del expresidente Trump. El migrante había recibido en 2019 protección contra la deportación, al considerar un juez que enfrentaría represalias si regresaba a El Salvador. No obstante, fue enviado al Cecot tras ser señalado por presunta vinculación con pandillas, algo que organizaciones humanitarias han denunciado como una violación de sus derechos.
En medio de la controversia, más legisladores demócratas han solicitado permiso para viajar al país centroamericano y visitar tanto al gobierno salvadoreño como el penal donde se encuentra Ábrego. Entre ellos figuran Adriano Espaillat, presidente del Caucus Hispano del Congreso; Delia Ramírez, de la Comisión de Seguridad Nacional; y los representantes Robert García, Yassamin Ansari y Maxwell Alejandro Frost.
“Estamos listos para viajar lo antes posible”, escribieron García y Frost en una carta al presidente del Comité de Supervisión de la Cámara, James Comer, solicitando que la delegación sea oficial. Para ello, se requiere la aprobación del liderazgo republicano, que hasta ahora ha rechazado apoyar la moción.
Mientras tanto, la administración Trump ha defendido sus acciones, alegando que los demócratas “priorizan a inmigrantes ilegales sobre los ciudadanos estadounidenses”.
El congresista republicano Riley Moore incluso visitó el Cecot esta semana y publicó una fotografía con el pulgar arriba frente a una celda repleta de reos.