García señaló que el índice de trabajo a distancia, realizado por NordLayer, plantea que El Salvador, junto a Honduras y Guatemala, se encuentran rezagados en la implementación del teletrabajo entre las empresas.
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El índice mide ciberseguridad, economía, infraestructura y criterios de seguridad social que garanticen el trabajo remoto.
“El más bajo es Honduras, con 0.39 sobre 1, Guatemala 0.41, y el tercero El Salvador 0.43. A fecha de 2023 uno puede decir que El Salvador es uno de los países de América Latina con menor incidencia de teletrabajo pasada la pandemia”, indicó García.
El índice publicado en 2023 revela que, de los 108 países abordados, El Salvador se encuentra en el puesto número 100 con un puntaje de 0.43 sobre la base de uno que se evalúa.
Panamá se encuentra en la posición 63 con un puntaje de 0.61, mientras que Costa Rica está en el escalón 54 con 0.64 puntos.
Dinamarca, Países Bajos y Alemania son las tres naciones catalogadas como las mejores para trabajar a distancia.
¿Qué ocurre?
García explicó que la falla en países con baja adopción del trabajo remoto es que las actividades económicas no se pueden realizar desde los hogares.A nivel de conectividad, el investigador destacó que la cobertura de internet en El Salvador está por arriba de un 60 %, pero aseguró que el reto es persistente en la zona rural.
“Donde fallamos es en las zonas rurales, es la ventaja de tener países pequeñitos con alta densidad, ahí tenemos más trabajos”, añadió García.
Los países con más rezago también estarían afectados por la falta de habilidades para realizar teletrabajo.
La tesorera de la Asociación Nacional de Profesionales en Talento Humano (Asotalent), Cinddy Fernández, aseguró que en la situación perjudica el que muchos empresarios no poseen procesos estructurados.
“Si el proceso interno no existe o es inexistente entonces no tengo forma de verificar que la persona en teletrabajo o en homeoffice esté dando los resultados, y viene el términos de confianza de que la persona vaya a dar los resultados”, añadió la vocera de Asotalent.
Fernández aseguró que en el país hay muchas personas interesadas en trabajar de esta forma, buena parte mujeres y jóvenes.
El investigador del INCAE aseguró que hay estudios internacionales que comprueban que el teletrabajo puede generar impactos positivos en la productividad de las empresas.
García indicó que en Estados Unidos se demostró que el teletrabajo aumentó un 8 % la productividad.
Horarios laborales
Pese a lo anterior, en América Latina “cuesta trabajo” que las empresas tomen estas estrategias, porque impulsan un trabajo más conservador.La vocera de la gremial destacó la importancia de los límites dentro de esta estrategia, pues durante la pandemia se demostró que una parte de los trabajadores tendían a dedicar más horas laborales de las establecidas.
El socio de la firma BDS El Salvador, Manuel Rosa, aseguró la semana pasada que en El Salvador se replica en su mayoría un teletrabajo híbrido con las labores presenciales.
Rosa aseveró que desde la pandemia se demostró que las personas trabajan más de lo estipulado en la ley. Según el Código de Trabajo, en El Salvador las empresas están obligadas a exigir un máximo de 44 horas diurnas o 39 horas nocturnas, un promedio de ocho horas y siete horas al día, correspondientemente.
El vocero de BDS El Salvador indicó que este tipo de situaciones deben motivar a la aprobación de un derecho a la desconexión digital, estrategia impulsada en la región por Costa Rica.
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