El precio de la carne bovina minorista en el mercado salvadoreño se redujo hasta 3 % por la exención de los aranceles y el ingreso de nuevos competidores, reveló un estudio de la Superintendencia de Competencia.

La institución difundió este miércoles algunos resultados de un estudio sobre el mercado de carne bovina, anunciado en agosto de 2024 en medio de un aumento de precio de esta fuente proteína de las familias salvadoreñas.

De acuerdo con la Superintendencia, la facilitación de trámites para la importación de carne bovina de nuevos competidores, como Uruguay y Argentina, así como la exoneración del pago de aranceles a la importación generó una reducción en el precio minorista de entre un 1 % y un 3 %.

“La apertura del mercado de carne bovina es un paso hacia una economía más competitividad y resiliente”, señaló la institución en un comunicado.

El Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) abrió más el mercado salvadoreño al avalar en febrero de 2024 los permisos para importar carne bovina desde Colombia y, en octubre de ese año, también recibió el primer cargamento desde Argentina. A la oferta se sumó Paraguay, luego de recibir en julio de 2025 la aprobación para el comercio.

A pesar de la mayor participación de competidores, el estudio reveló que existe alto grado de concentración en la distribución minorista de carne en los canales de supermercado.

 

Importaciones

El estudio de la Superintendencia encontró un 60 % de la carne que consumen los salvadoreños es importada, cuyo mayor proveedor es Nicaragua.

El Banco Central de Reserva (BCR) reporta que las importaciones de carne bovina y despojos comestibles -incluye bovina, pollo y otras de origen animal- sumaron $339.15 millones al término de 2024, un 11.8 % de crecimiento frente a 2023.

De esto, Nicaragua fue el mayor proveedor con un 53.7 % de participación, seguido de Estados Unidos con un 28.5 %. El Salvador también importa carne de Guatemala, Costa Rica, Colombia, Argentina, Honduras, Chile y Holanda.

Según el BCR, de enero a julio se han importado más de $222.45 millones en carnes.

Para los hogares de escasos recursos, los precios de la libra de carne son prohibitivos, llegando a costar más de $6 los cortes de mayor especialidad. La Superintendencia de Competencia señaló que este alimento representa un 21.70 % del costo de la canasta básica alimentaria (CBA) urbana.